14/5/22

Preciada pérdida

Los sentimientos afloran en uno cuando perdemos algo que queremos, deseamos y necesitamos al mismo tiempo. Llegué a esta conclusión, cuando hace unos días, desgraciadamente perdí a quien apareció de repente en mi vida ajedrecística, ayudándome a transitar el camino. Ella siempre permanecía pacientemente muy cerca mío. Apenas una mirada bastaba para entendernos y jugábamos placenteramente al ajedrez durante horas y horas, en la que yo le trasuntaba toda la pasión que sentía. Además ella me ayudaba en la vida, a desarrollar mi actividad ajedrecística en este mundo moderno. Tenía con ella un perfecto entendimiento y como consecuencia de un simple olvido seguramente la he perdido para siempre. Y ahora estoy muy deprimido, esperando que se produzca el milagro de volver a recuperar a mi preciada tablet que dejé olvidada en el bar.



4/5/22

Superhéroe ajedrecístico

Mi nieto de cinco años estaba dando los primeros pasos en el conocimiento del ajedrez. Un día le dije en broma que en mi juventud yo ganaba todas las partidas, sin darme cuenta que desde ese momento, me había encarnado en su mente infantil como la figura de su superhéroe ajedrecístico.

Aquella noche, luego de mostrarle la figura de Capablanca en un libro de ajedrez, le expliqué que había sido uno de los mejores jugadores de mi época. Le comenté que siempre me decía cuando jugaba con él, que lo primero que debíamos aprender eran los finales. Entonces, le estuve enseñando en la mesa del living como dar los diversos mates con rey y dama y rey y torre.

A la mañana siguiente me levanté algo tarde y lo encontré con sus brazos apoyados sobre la mesa del living, observando muy pensativo el tablero con las piezas de ajedrez que había quedado de la noche. Al verlo así, se me ocurrió preguntarle:
¿Qué te pasa, soñaste algo malo anoche?

Soñé que me había perdido en un bosque y al tratar de buscar el camino de vuelta, encontré una casita de madera. Al abrir la puerta, estabas vos igual que en esa foto de cuando eras joven, jugando al ajedrez con Capablanca, pero justo en ese momento me desperté.

Fue allí que quedé completamente sorprendido y sin saber que responder, cuando mi nieto giró la cabeza y mirando a su superhéroe con ansiosa curiosidad , le preguntó de sopetón:

Dime abuelo, ¿le ganaste a Capablanca esa partida? 















Finalista VII Concurso de Cuentos breves. Héroes cotidianos.

Incluido en el libro Reflexión.

Creatividad Literaria. España. Julio 2022.