25/2/22

Vivificante tablero

Era una partida muy complicada y tuvo que sacar fuerzas de flaquezas para lograr safar de una red de mate que le tendió el enemigo. Por suerte, quedó luego en mejor posición, pero como esa lucha lo había dejado exhausto, con cierta alegría buscó recuperarse por un momento, cerrando plácidamente los ojos ante ese vivificante tablero. Fue allí cuando lo despertó su mujer muy enojada, para preguntarle si pensaba quedarse toda la mañana del domingo en la cama, o si se iba a levantar de una vez por todas, para ayudarla en las tareas domésticas. Entonces, se cubrió la cabeza con la almohada, para no seguir oyendo las recriminaciones de su esposa y cerró los ojos, tratando de abrirlos nuevamente ante aquel vivificante tablero de su sueño.

 


24/2/22

Sombra ajedrecística exitosa

Un día, cansada ya de ser la sombra de Garry Kasparov, decidió iniciar una nueva vida ajedrecística exitosa. Fue allí, cuando al reflejarse en el espejo, apareció la imagen de Magnus Carlsen, quien le brindó una sonrisa acogedora.

 


23/2/22

Pasión secreta

Me enamoré de ella desde el primer momento en que la vi. Fue en la fiesta de egresados como bachilleres en la escuela secundaria. Ya al cruzar nuestras miradas se produjo entre nosotros una instintiva y recíproca atracción, y entonces comenzamos a charlar sobre nuestro futuro.

Que ella detestara que me dedicara al juego de ajedrez, que era mi pasión, y que a mí no me gustara para nada seguir la carrera de arquitectura, no fue un obstáculo para iniciar nuestra relación amorosa. Ella soñaba en el futuro con ser Arquitecta y que su novio también lo fuera, y no era cuestión de defraudarla. Así que me anoté con ella en el curso del turno tarde en la Facultad de Arquitectura.

Pero ocurrió que poco a poco nos fuimos distanciando en los estudios, porque ella era una alumna aventajada que fue avanzando con las mejores notas, mientras que yo era un estudiante desganado, que solo pude aprobar raspando algunas materias y debí recursar la mayoría de ellas.

Lo que ella nunca supo es que por las noches, me dediqué en un club de ajedrez a desarrollar a escondidas mi verdadera pasión. Y aunque parezca mentira, lo bueno es que fui progresando y llegué a ser maestro al ganar varios torneos. Lo malo es que no sé que va a pasar ahora con nuestra relación. Esta tarde en la Facultad voy a revelarle el secreto, y decirle que he decidido que mi futuro profesional no va a ser el de Arquitecto sino el de ajedrecista. Es que anoche me consagré con el título de campeón nacional de ajedrez.

 


21/2/22

La partida pendiente

Apareció por sorpresa ante ella en el bar del club de ajedrez. Hacía muchísimo tiempo que él no venía por allí y ahora era un conocido profesional del mundo de la moda, codiciado por las mujeres. Al verlo, la volvió a conmover con su mirada seductora y su voz melodiosa. Con una sonrisa, él le propuso jugar la revancha pendiente a aquella partida amistosa que ella le había ganado. Luego había dado lugar a una noche de pasión, que ella nunca había podido olvidar.

¡Había pasado tanto tiempo! ¿Qué porción de su amor ahora le daría después de esa partida? Una mezcla de emociones la envolvió, y se mantuvo en silencio. En ese instante, pensó que él no la olvidaría si mantenía esa revancha perpetuamente pendiente. Entonces, sonriéndole, le contestó que quizás otro día porque ahora no podía, y se dirigió tristemente feliz a jugar su partida en el torneo femenino de ajedrez.

 



19/2/22

Aprovechar la inversión

Su mujer falleció al caerse el avión que la trasportaba de regreso de sus vacaciones con sus amigas. El maestro de ajedrez lamentó mucho ese accidente, porque ya le había abonado al sicario todo el monto solicitado para que la matara cuando llegara al aeropuerto, simulando un asalto.

El hombre se negó terminantemente a devolverle el dinero.

— ¿No tiene algún otro problema? ¿Un pariente? Piense en alguien a quien deteste, y cumplo con el encargo —, le dijo el sicario.

Y para aprovechar la inversión realizada, el maestro le dio el nombre de su rival ajedrecítico que lo tenía de hijo, y que siempre se burlaba de él al vencerlo en las competencias ajedrecíticas. 

 


 

18/2/22

Ajedrecista contento

Era un ajedrecista que por las noches jugaba en el club de ajedrez y aunque en la mayoría de las partidas perdía, siempre estaba contento. Tenía una alegría contagiosa que penetraba en el alma de sus adversarios y les arrancaba una sonrisa, o los hacía reír con jugadas disparatadas o comentarios jocosos. Sus rivales deseaban jugar con él partidas amistosas, porque si bien era un jugador débil, deslumbrados por esa simpatía que emanaba de su ser, les contagiaba su optimismo. Nadie imaginaba que ese ajedrecista contento cuando volvía a su casa, escondía la cabeza bajo la almohada y envuelto en la lamentable mediocridad de su juego, lloraba desconsoladamente por sus fracasos ajedrecísticos. Y después de esa reparadora descarga espiritual, retornaba nuevamente contento y rozagante a jugar al ajedrez a la noche siguiente.

 


15/2/22

El peón valiente

Un valiente peón avanza mientras el corazón le late,

buscando con mucha abnegación ser el héroe del combate.

Es una misión arriesgada con rivales en el camino,

y rodeado de amenazas trata de llegar a destino. 

Al fin logra salir indemne de una peligrosa estocada,

y trata de alcanzar orgulloso esa última línea ansiada.

Cuando en esa dura lucha al fin arriba al lugar con euforia,

el peón ofrenda su vida en pos de conseguir la victoria.



 

 

 

 

 

 


 

Finalista VII Concurso de Micropoemas.

Mirando hacia delante.

Incluido en el libro Alas de aire.

Creatividad Literaria. España. Febrero 2022.

12/2/22

La vida juega al ajedrez

Con un ajedrez en lucha aguerrida

juega el mundo en un tablero gigante,

donde la estrategia es ir adelante

buscando tácticas de acometida.


Debemos motivarnos en la vida

aunque la meta se encuentre distante,

la perseverancia es muy importante

siguiendo firmes la senda elegida.


Un trabajo digno el hombre reclama,

y hay que participar en esa guerra

dispuestos para dar un buen combate.


No nos quedemos ociosos en cama,

pues el objetivo humano en la tierra

es darle a la indigencia jaque mate.

 


 

 

 

 

 

 

 

Finalista III Certamen de Sonetos William Shakespeare.

Letras como Espada. España. Febrero 2019.

10/2/22

El llanto de mi abuela

En mi niñez siempre visitaba la casa de mi abuelo quien había sido en su juventud maestro de ajedrez y me enseñaba con mucho cariño a jugar. Un día vi mucha gente en su casa y al preguntarle a la bruta de mi tía, me dijo como si tal cosa que mi abuelo había muerto. Al escucharla quedé sorprendido y apenado, pero me tragué las lágrimas, porque tuve vergüenza de que ella me viera llorar. A la noche siguiente, para que la abuela no se sintiera sola, mi papá me mandó a dormir a su casa y esa noche me despertaron sus sollozos. Al darse cuenta, me acarició diciéndome que no me preocupe, y entonces, junto al juego de ajedrez de mi abuelo me desahogué, y lloré con ella en silencio.




3/2/22

Insinuaciones inapropiadas

Hay cosas que simplemente concluyen abruptamente aunque uno no quiera. El maestro de ajedrez disfrutaba enseñándole a su alumna de la que estaba perdidamente enamorado, cuando se dio cuenta que nada dura para siempre.

En un momento dado ella se plantó frente a él, apretando los puños, conteniendo el aliento, y tratando de no soltar las lágrimas que amenazaban con salir, le dijo:

Maestro, ya no quiero seguir más con sus clases de ajedrez.

Él la miró sorprendido, y cuando se convenció de lo que ella decía era categórico y contundente, sus esperanzas de amor se desmoronaron por completo. Luego de escucharla guardó silencio y desvió la vista de sus ojos, porque sabiendo que era casada, seguramente ella pretendía decirle algo más.

—Comprendo —, le contestó débilmente, antes que ella volviera a hablar.

Su voz era apenas un murmullo audible. Muy diferente de su voz firme de hacía solo unos instantes, dándole consejos para jugar en el ajedrez como también en la vida, los que envueltos con algunas insinuaciones amorosas, evidentemente fueron inapropiados.

Finalmente, cuando la vio retirarse con los libros de ajedrez en sus manos, comprendió que desde ese momento dejaría de disfrutar de su presencia para siempre. 




2/2/22

La estocada final

En aquel torneo, la partida de ajedrez que disputaba con ella estaba en su apogeo. Era muy hermosa y la miraba mientras jugaba, admirando la delicadeza del movimiento de sus manos. Me hubiera gustado estar allí sentado frente a ella toda mi vida. Quién hubiera imaginado que con esa cara de niña, dulce y suave, jugara en forma tan agresiva. La echaré de menos, porque no sé si la volveré a ver en otro torneo. Eso pensé en el preciso instante que recibí la estocada final del jaque mate mortal.

 

















Finalista VIII Certamen de Microrrelatos. Melgar.
Incluido en el libro Alas de mujer.
Letras como Espada. España. Octubre 2022.

Lluvia de piezas de ajedrez

La esposa del maestro de ajedrez retornó sorpresivamente de su viaje de promoción de venta de juegos de ajedrez. Cuando entró al departamento, su marido no estaba, pero encontró sobre la mesa del living un tablero de ajedrez con las piezas que ella promocionaba, envueltas en una fragancia perfumada. Entonces, luego de guardar las piezas en la caja, abrió la ventana del octavo piso con desesperación. Fue allí, cuando un grupo de sorprendidos peatones, mirando intrigados hacia arriba, trataban de encontrar explicación a esa lluvia de piezas de ajedrez que caían desde el cielo. 




Antigüedad

Lo miró cuidadosamente. No era la primera vez que se paraba frente a esa vidriera de antigüedades, pero nunca se había sentido atraído por nada. Sin embargo hoy era distinto. Aquel objeto dentro de ese envase le producía una sensación extraña para él y necesitaba poseerlo. Decidido, entró en el negocio y lo compró. Ya en su departamento rompió el envase y lo extrajo en forma cuidadosa, mientras leía la etiqueta externa: "Juego de ajedrez año 2023". ¡Dios mío que hermosa antigüedad! "Ahora en el siglo 22 todo es on-line", se dijo. Entonces, muy intrigado, se puso a investigar en la Web en que año se había dejado de jugar al ajedrez con piezas y tablero.

 


1/2/22

Acoso trunco

El rey negro estaba ubicado tras un peón y al retroceder un paso, quedó semioculto tras un caballo. Es allí que al desplazarse lo descubre la reina blanca, quien al mirarlo queda embelesada. Al compararlo con su consorte que se encuentra detrás de ella, se pregunta si será cierto que los negros son más ardientes que los blancos, como dicen las malas lenguas. Justamente en el momento que él se aleja del caballo, es cuando ella consigue acercarse aún más. Al ver el contraste de su piel tan junto a la suya se incrementan sus fantasías y entonces, desea toquetearlo mediante jaques y jaques sensuales una y otra vez. Pero lamentablemente sus intenciones amorosas quedan truncas al escuchar al conductor de las negras que grita con voz de barítono:¡Jaque mate!, mientras derriba a su consorte blanco sobre el tablero.

 


Abstracción ajedrecística

Mientras llueve intensamente, el viento sopla con fuerza y estremece las ventanas de la casa. La madre mira al cielo oscuro y piensa en su jardín, porque le preocupa que la lluvia destroce sus rosas. El padre mira el cielo oscuro y piensa si el desagüe del techo no estará obstruido por las hojas de los árboles. El hijo no mira al cielo oscuro, ni piensa en la lluvia, porque esta muy abstraído jugando al ajedrez con su tablet.